Un rayo de luz. Un corazón agradecido y manos dispuestas a dar.

Hola mis amados lectores: Tengo algún tiempo sin escribir, eso no quiere decir que no he estado pensando en ustedes. Cada día me levanto y agradezco a Dios y al señor por todo lo que me ha dado, lo que me da, y lo que me dará. Se que todo ha llegado a mi vida por añadidura. Si reconocemos que esta vida solo llegamos desnudos y llorando.

Podremos ser agradecidos y recibiremos las bendiciones que nos corresponden, pienso que lloramos al nacer por que dejamos nuestra cómoda y agradable casa. Un espíritu que eligió sus padres terrenales y estará en el vientre de su madre por algún tiempo. Cálida su estadía lo hace en el refugio del ser que escogió como madre. Por esos lloramos al sentir ese frió del exterior al nacer. Por dejar nuestra comodidad sin saber lo que nos espera ….